Mi esposa está enganchada a estos programas y la verdad es que a mi me llaman la atención bastante tambien. Hemos llenado el garaje de cosas que hasta hace poco no sabíamos que existían (y que en la vida usaremos una o ninguna vez).
Lo que mola de estos programas es ver a un Vascote de tomo y lomo usando términos como “color atrevido” en vez de “azul horrible” o “mártir” en vez de “taco de madera para darle hostias”. Estos programas nos enseñan que además de para estar tecleando durante 8 horas al día, las manos nos sirven para crear cosas que a veces son hasta útiles.
Claro, como vascos que son, alguna vez se pasan al intentar hacerlo todo a lo grande.
Bricomanía
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